El miércoles 3 de noviembre se llevó a cabo la tercera charla que el Ateneo Juvenil capital Federal de CARBAP organizó en su Ciclo de Capacitación Agropecuaria para Jóvenes.
Siguiendo la línea de las disertaciones anteriores, se estudió la realidad del sector cárnico eslabón por eslabón. En tiempos donde el aumento de precios en las carnicerías es tapa de todos los diarios, esta cita nos sirvió a los jóvenes ruralistas para poder comprender mejor la realidad de la cadena industrial y conocer todos los procesos por los que un kilo de carne atraviesa desde que sale del campo hasta que llega a la mesa.
Si bien el debate está abierto cuando se hace referencia al sobreprecio que cada intermediario aplica al producto, la realidad nos muestra que en el proceso de transformación del producto intervienen varios agentes que, nos guste o no, necesitan tener alguna rentabilidad que les permita seguir en la actividad. Para ello, la charla de Torelli no escatimó en explicaciones y conclusiones que mostraron todos los componentes de la cadena que agregan valor al producto de nuestros ganaderos.
La escasez y la dificultad que afronta el sector para recuperar el stock en el corto plazo fueron algunas de las inquietudes del auditorio mayoritariamente integrado por estudiantes de la carrera de Agronomía. Si bien el disertante explicó que de un día para el otro es imposible retomar la senda de producción de años anteriores, expuso la ventaja con la que contamos en el país con respecto a los otros productores mundiales de carne. La mayoría de éstos ya han alcanzado un tope de producción tanto extensiva como intensivamente, es decir, no cuentan con más superficie para agrandar sus rodeos y tampoco pueden generar más aumento en su tecnología de producción. En cambio, la producción de carne argentina puede incrementarse en ambos sentidos, y así poder recuperar el lugar que nunca debimos dejar de ocupar.
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